1. Presencia
Escucho el susurro del viento esconderse entre mis pestañas. Y puedo sentir cada latido como si me fuese guiando al otro lado. Veo aguas profundas… un río. Es lo que hay del otro lado y tengo miedo de cruzarlo. Que fluya sobre mí, dentro de mí y me ahogue con cada respiración. De pronto, me cuestiono: cómo es que siente, se contiene tanto temor en un cuerpo tan pequeño. Y con cada paso sobre el sendero, los luceros parecen apagarse, mientras el aire se escapa y las ramas me acarician. Y me vuelvo pequeño, más pequeño. Ínfimo. La garganta se me cierra y las palabras las muerdo con delicadeza. Pero mi cuerpo me ha traicionado. Lo necesito y me abandona. Un paso más y el frío se aleja. También me deja solo. Trato de escapar de este bosque sin salida. Pequeño, más pequeño. Sin aliento para continuar. Y qué hay más allá. Aún con todo este terror que me abraza la piel, quiero saberlo. Y comprimida, en medio de la noche, la esperanza que me regocija ya está fuera del corazón. E